K’bridge Club — Xerjoff

Un perfume que encarna la exclusividad y la dulzura cautivadora

K’bridge Club de Xerjoff es una fragancia que rinde homenaje a la elegancia discreta y la opulencia sin excesos. Inspirado en la icónica tienda Xerjoff en Knightsbridge, Londres, este perfume abraza a hombres y mujeres con un acorde floral y gourmand que seduce y envuelve. Lanzado en 2019, K’bridge Club es una invitación a saborear la exclusividad y la calidez de un lugar donde la rosa y la vainilla se dan la mano en un abrazo exquisito.

Familia olfativa: Floral Gourmand
Notas de salida: Rosa de Bulgaria (rosa Damascena de Bulgaria)
Notas de corazón: Rosa, cilantro
Notas de fondo: Vainilla Bourbon, caramelo
Perfumista: Chris Maurice
Año de lanzamiento: 2019

Un viaje olfativo que despierta los sentidos

K’bridge Club se abre como una rosa recién cortada en un salón privado de Londres. La rosa de Bulgaria despliega desde el inicio un frescor refinado y majestuoso, revelando matices aterciopelados que anuncian una fragancia con carácter. A medida que la esencia se posa sobre la piel, la nota de corazón profundiza esta experiencia floral: pétalos voluptuosos se mezclan con un sutil toque de cilantro, aportando un giro especiado y sofisticado que despierta la curiosidad. En el final, el perfume se sumerge en una base gourmand irresistible de vainilla Bourbon y caramelo, dejando un rastro dulce, seductor y envolvente que perdura.

El arte olfativo de Chris Maurice

Detrás de esta creación está Chris Maurice, maestro perfumista que domina la alquimia de notas florales y gourmand con elegancia y atrevimiento. Con K’bridge Club, Maurice fusiona tradición y modernidad: rescata la majestuosidad de la rosa damascena y la combina con la calidez reconfortante de la vainilla y el caramelo, logrando una fragancia que abraza con dulzura y nobleza. Su composición impecable convierte cada aplicación en una experiencia refinada y contemporánea.

Notas de salida: Rosa de Bulgaria, una apertura majestuosa

Desde el primer instante, la rosa de Bulgaria aporta un aroma floral rico y sofisticado. Esta apertura evoca la sensación de entrar en un club privado decorado con ramos exuberantes, donde cada pétalo refleja la tradición perfumista europea con un guiño de frescura aristocrática.

Notas de corazón: Flores y especias que seducen

El corazón revela la dualidad encantadora de K’bridge Club: la rosa continúa reinando, ahora más intensa, mientras el cilantro añade un matiz verde, casi picante, que realza su carácter. Este acorde rompe la linealidad y da paso a un perfume vivo y magnético.

Notas de fondo: Dulzura gourmand que abraza

El final es un deleite para los sentidos: la vainilla Bourbon se entrelaza con la cremosidad del caramelo, creando una estela golosa, cálida y adictiva. Esta base gourmand se fija en la piel como un susurro lujoso que acompaña con elegancia hasta bien entrada la noche.

Versatilidad para amantes de la exclusividad

K’bridge Club es la elección perfecta para quienes buscan una fragancia con un sello distintivo y envolvente, ideal para climas templados y fríos. Su estructura equilibrada la hace apta para el día y la noche, adaptándose con naturalidad a momentos especiales y encuentros íntimos.

Un homenaje olfativo a Knightsbridge

Esta creación de Xerjoff es un tributo al refinamiento del barrio londinense de Knightsbridge y a la boutique Xerjoff que inspira este perfume: lujo discreto, sofisticación sin ostentación y un guiño al placer hedonista. K’bridge Club invita a vestir la piel con un aura de rosa, especias y dulzura envolvente, un pasaporte olfativo para quienes aprecian la belleza atemporal.