Mortal Skin — Stéphane Humbert Lucas 777

Un veneno hipnótico entre sombras, mística y seducción

Mortal Skin de Stéphane Humbert Lucas 777 es una fragancia que se desliza como una serpiente entre los sentidos, envolviendo el cuerpo y el alma con un aura de misterio oscuro y sensualidad enigmática. No es un perfume común: es una historia olfativa cargada de simbolismo, ambigüedad y emoción. Su creador, el artista perfumista Stéphane Humbert Lucas, lo concibió como una metáfora viva de la fascinación y el peligro, de lo eterno y lo efímero. Lanzada en 2015, esta creación unisex es un viaje por una alquimia profunda donde el incienso, la tinta y la zarzamora se entrelazan con resinas nobles, maderas ahumadas y almizcles animales, creando una huella envolvente e inolvidable.

Familia olfativa: Oriental Amaderada

Notas de salida: Tinta, zarzamora, incienso, ládano
Notas de corazón: Mirra, opopónaco, iris, cardamomo, abrótano
Notas de fondo: Styrax, ámbar gris, cedro del Atlas, cedro, sándalo, abedul, almizcle
Perfumista: Stéphane Humbert Lucas
Año de lanzamiento: 2015

Un viaje olfativo que se revela en capas

Mortal Skin es una fragancia que muta sobre la piel, como una criatura mitológica que cambia de forma según la luz y el instante. Su apertura es una explosión oscura y embriagadora: la tinta da paso a una zarzamora jugosa y casi venenosa, mientras el incienso y el ládano introducen un aire ceremonial y casi ritual. Luego, el corazón se adentra en una dimensión más cálida y espiritual, donde resinas milenarias como la mirra y el opopónaco se funden con el polvo delicado del iris y el frescor especiado del cardamomo. Al final, su estela se vuelve terrosa, animal y mística: una mezcla balsámica de maderas preciosas, ámbar gris, abedul ahumado y un fondo almizclado que hechiza con su duración y profundidad.

El arte olfativo de Stéphane Humbert Lucas

Stéphane Humbert Lucas es uno de los perfumistas más poéticos del panorama contemporáneo. Con su firma 777, ha dado vida a una colección donde la espiritualidad, la belleza y lo inesperado se entrelazan en fórmulas magistrales. En Mortal Skin, Lucas crea un perfume conceptual que va más allá del gusto: es una experiencia sensorial y filosófica, una obra de arte líquida. Sus notas no se limitan a agradar, sino a contar una historia que evoluciona capa tras capa, seduciendo la mente tanto como el cuerpo.

Notas de salida: La tinta y la zarzamora, un inicio enigmático y adictivo

La fragancia comienza con una mezcla intrigante y provocadora: tinta negra, símbolo de escritura y piel marcada; zarzamora jugosa y oscura, casi salvaje; y un incienso que evoca templos olvidados. El ládano, resinoso y balsámico, redondea la salida con un toque místico que abre la puerta a un universo sensorial profundo.

Notas de corazón: Resinas sagradas y flores empolvadas en armonía espiritual

En el corazón, la fragancia revela su alma contemplativa: mirra y opopónaco, resinas históricas con carácter sacro y medicinal, se entrelazan con el iris, delicado y empolvado. El cardamomo aporta un frescor especiado casi etéreo, mientras el abrótano añade un matiz verde amargo que equilibra la composición con elegancia.

Notas de fondo: Un eco cálido, animal y amaderado que perdura

La base es compleja y profunda. La suavidad envolvente del sándalo y el cedro se mezcla con el ámbar gris, materia de leyenda en perfumería, que da un toque marino, terroso y animal. El styrax y el almizcle intensifican el carácter oscuro y sensual, mientras el abedul introduce un humo fino que recuerda al cuero curtido y la piel desnuda bajo la luna.

Versatilidad para almas oscuras y refinadas

Mortal Skin no es una fragancia para cualquiera. Su carácter cambiante, su profundidad aromática y su longevidad excepcional la convierten en un perfume ideal para quienes buscan algo distinto, que hable por sí solo. Es unisex en esencia, perfecta para noches de introspección, cenas misteriosas o encuentros donde el aura importa más que las palabras. Funciona maravillosamente en piel y tiene una proyección elegante y poderosa sin ser invasiva.

Un diseño que es pura poesía visual

El frasco de Mortal Skin es una obra de arte por derecho propio. Inspirado en la piel de serpiente, con detalles metálicos y oscuros que evocan misterio y peligro, representa la dualidad entre belleza y veneno. Cada aspecto del diseño refleja el espíritu artístico de Stéphane Humbert Lucas: sofisticación, simbología y una estética fuera del tiempo.

Disponible en Perfumería Laura, el templo de la perfumería nicho en el corazón de Alicante desde 1975.
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