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Hablar de una fragancia que pertenece a la familia olfativa Coriácea - Amaderada es sumergirse en un viaje sensorial que evoca la fuerza y la elegancia de la naturaleza, combinando la robustez del cuero con la calidez de las maderas nobles. Es una experiencia que encierra la masculinidad en su máxima expresión, pero también la sofisticación y la profundidad.
En las notas de salida, se despliega un arco iris de aromas intensos y seductores que abren la fragancia con una explosión de vitalidad y carácter. El cuero, firme y distintivo, se entrelaza con el humo del incienso, creando una atmósfera misteriosa y envolvente. El cardamomo y el ciprés aportan un frescor vigorizante, mientras que la madera fresca de pino añade una pizca de vitalidad natural. La almendra amarga y el toque afrutado del pomelo dan un matiz jugoso y sorprendente, equilibrado por la serenidad de la lavanda y la complejidad de la artemisa. La canela, el azafrán y la bergamota bailan en armonía, aportando calidez, especias y luminosidad. La manzana y la nuez moscada añaden un toque dulce y reconfortante, mientras que el styrax completa esta sinfonía olfativa con su característico aroma amaderado y resinado.
En el corazón de la fragancia, nos sumergimos en un remolino de notas que revelan la profundidad y la riqueza de su carácter. El cedro, majestuoso y reconfortante, se mezcla con la dulzura balsámica de la mirra y la misteriosa esencia del olíbano ahumado. La madera de guaiac aporta su característico aroma terroso, mientras que el jazmín y el muguet despliegan su delicadeza floral, envolviendo el corazón de la fragancia en un aura de suavidad y elegancia. El geranio y la madera de agar añaden matices verdes y amaderados, complementados por la sensualidad del ládano y la profundidad del chipre.
En las notas de fondo, la fragancia alcanza su plenitud y su máxima expresión, dejando una estela inolvidable y envolvente. El vetiver, con su aroma terroso y ahumado, se funde con la calidez del ámbar y la suavidad de la vainilla, creando una base profunda y reconfortante. El tabaco aporta su característico aroma amaderado y especiado, mientras que el dulce oud y el ámbar gris añaden una sensualidad animal y misteriosa. El almizcle y el pachulí se entrelazan en una danza hipnótica, mientras que el sándalo y el azafrán aportan calidez y luminosidad. El gajak, la tonka y el benjuí/tolu completan esta composición con sus notas dulces y resinosas, dejando una estela duradera y adictiva.
"Al Bashiq" de Nabeel es una obra maestra sensorial que despierta los sentidos con una armoniosa sinfonía de notas que transportan a quienes la perciben a un viaje olfativo incomparable. Esta fragancia, perteneciente a la familia olfativa Cuero tanto para Hombres como para Mujeres, se erige como un hito en el mundo de la perfumería desde su lanzamiento en el año 2022.
La experiencia sensorial de Al Bashiq comienza con una explosión de notas de salida que despiertan los sentidos y preparan el escenario para el viaje olfativo que está por emprenderse. El cuero, el incienso y el pino se entrelazan con la calidez de la almendra amarga, la canela y el cardamomo, creando una apertura audaz y sofisticada que cautiva desde el primer instante.
A medida que la fragancia evoluciona, las notas de corazón emergen con una profundidad y riqueza incomparables. La madera de oud y la mirra se fusionan con el incienso de olíbano y las notas terrosas, creando un corazón que es al mismo tiempo majestuoso y envolvente. El ciprés, el cedro y el lirio de los valles añaden una dimensión fresca y floral, mientras que el ládano y el jazmín aportan una sensualidad exquisita a la composición.
Finalmente, las notas de fondo revelan una base rica y seductora que perdura en la piel durante horas. La madera de oud, el pachulí y el vetiver se combinan con la dulzura del ámbar gris y la vainilla, mientras que el bálsamo de Tolú y el almizcle añaden una calidez reconfortante. El sándalo y el benjuí aportan una profundidad resinosa, mientras que el tabaco y la madera de gaiac confieren un toque ahumado y masculino. El haba tonka, con su dulzura avainillada, completa esta sinfonía olfativa con un toque de indulgencia.
En resumen, Al Bashiq de Nabeel es mucho más que una fragancia; es una experiencia sensorial inolvidable que cautiva los sentidos y deja una impresión perdurable en quien tiene el privilegio de experimentarla. Su compleja y exquisita composición la posiciona como una obra maestra en el mundo de la perfumería, destinada a ser apreciada y disfrutada por generaciones venideras.
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