Tipos de ácidos cosméticos
Para poder comprender adecuadamente el papel de los ácidos cosméticos sobre la piel es necesario establecer una primera clasificación que divide los ácidos en:
- Ácidos AHA (Alfa-Hidroxi-ácidos): son ácidos carboxilados que se localizan de manera natural en algunos alimentos. Por ejemplo, el ácido glicólico se encuentra en el azúcar de caña, el ácido cítrico en los cítricos, el ácido láctico en la leche, etc. Los ácidos AHA son solubles en agua.
- Ácidos BHA (Beta-Hidroxi-ácidos): estos ácidos no se disuelven en agua por lo que pueden penetrar en la piel a través de los folículos sebáceos. Un ácido BHA es, por ejemplo, el ácido salicílico muy recomendado para el tratamiento de pieles acneicas. Estos ácidos, además, son menos irritantes para la dermis que los ácidos AHA.
Qué es el ácido salicílico
Estamos ante un ácido BHA que se utiliza para la exfoliación de las células de la capa externa de la piel. Muy efectivo para la eliminación de residuos (grasa, puntos negros e impurezas) que taponan los poros produciendo el antiestético acné, entre otras imperfecciones. El ácido salicílico es también el activo perfecto que ayuda a preparar la piel para otros tratamientos más profundos. Este ácido BHA, usado junto con el ácido glicólico, se convierte en un potente exfoliante. Por último, decir que el ácido salicílico se recomienda en pieles gruesas como las masculinas, así como en pieles grasas con tendencia al acné.
Qué es el ácido glicólico
Es el ácido AHA más popular. Su principal función es la de renovar la piel, por lo que tiene un efecto peeling de gran acción rejuvenecedora. Además su uso favorece la hidratación de la piel, así como la producción de colágeno. No obstante, los resultados cosméticos del ácido glicólico dependerán de su concentración, al igual que del tiempo total que se aplique sobre la piel. Por ejemplo, una concentración baja de ácido glicólico para uso doméstico produce una descamación suave, regula la sequedad e hidrata las capas más superficiales de la piel. Sin embargo, una concentración de este ácido AHA superior al 70% ya se puede considerar un peeling médico capaz de cerrar los poros, eliminar las manchas, regular la producción de sebo y activar la creación de colágeno. El ácido glicólico no está recomendado para pieles demasiado sensibles o con rosácea.
Qué es el ácido láctico
Este es un ácido AHA producido de manera natural por nuestro propio organismo. ¿Te gusta hacer deporte? Pues has de saber que estás favoreciendo la hidratación natural de tu cuerpo. Hacer ejercicio activa la producción de ácido láctico mejorando notablemente el aspecto de la piel y aportándole suavidad, elasticidad e hidratación. Su principal ventaja es que actúa como un eficaz exfoliante sobre las pieles más sensibles. Lo podemos ver como ingrediente principal en cremas, champús, jabones, desmaquillantes, etc. Por otro lado, el ácido láctico es un perfecto aliado en la lucha contra las manchas solares. También mejora la producción de colágeno y elastina de nuestra piel. Esto significa que es perfecto para combatir las primeras líneas de expresión, ya que este ácido incide sobre la capa más profunda de la dermis estimulando su rejuvenecimiento.
Cómo emplear los ácidos cosméticos
Los ácidos cosméticos como el ácido glicólico o el ácido láctico, por lo general, se han de utilizar por la noche a fin de evitar la radiación solar. No obstante, el ácido salicílico se puede aplicar también por la mañana o durante el día. Algunos de ellos incluso los podrás combinar y otros los tendrás que alternar durante la semana. Por ejemplo, puedes aplicar un ácido AHA una vez a la semana y el resto de ácidos durante los días restantes.
Una rutina casera de belleza con ácidos cosméticos podría ser:
- El ácido glicólico 1 ó 2 veces por semana por la noche.
- El ácido salicílico a diario y por el día.
- El ácido láctico empezar con 2 ó 3 veces por semana. Dependiendo de la reacción de tu piel podrás usarlo más a menudo o no.
En Perfumería Laura, puedes encontrar una gran gama de cosméticos que combinan estos ácidos para dejar una piel más radiante y joven, pero en ningún caso, deberás empezar un tratamiento con ácidos cosméticos sin antes consultar con tu dermatólogo.