Soul of the Night

Familia Olfativa: Oriental Amaderada

Notas de Salida: Cuero, melocotón y oud

Notas de Corazón: Cuero, ciruela y almendra verde

Notas de Fondo: Oud y ámbar

Un viaje olfativo al corazón de la noche

Soul of the Night no es simplemente un perfume, es una declaración de intenciones. Desde su primer contacto con la piel, esta creación hipnótica nos invita a sumergirnos en una atmósfera donde el misterio, la pasión y lo prohibido se entrelazan con una maestría sensorial inconfundible. Una fragancia ideada para aquellos que no temen abrazar su lado más instintivo y visceral.

La entrada del deseo: una primera impresión inolvidable

Las notas de salida despliegan un cuero intenso, curtido con elegancia y rodeado por el dulzor jugoso del melocotón, que lejos de suavizar, intensifica el contraste con un oud profundo y resinoso. Este trío inicial crea una apertura potente, salvaje y refinada a partes iguales. La piel parece incendiarse con un aroma que evoca piel desnuda bajo la luna, placer crudo, momentos robados.

Un corazón que late con sombras y dulzura

A medida que la fragancia evoluciona, el cuero persiste, pero cede espacio al carácter afrutado y oscuro de la ciruela madura. Este acorde central es redondeado por la presencia inesperada de la almendra verde, que añade un matiz seco, casi herbáceo, contrastando con la opulencia del resto de las notas. Es un corazón que vibra con tensión, como una mirada que promete más de lo que dice.

Un fondo denso y envolvente como la medianoche

Las notas de fondo sellan esta experiencia olfativa con una presencia poderosa de oud y ámbar. El oud aquí no es meramente decorativo: es el alma de la composición, un eco amaderado que reverbera con profundidad, reforzado por la calidez balsámica del ámbar. Esta base convierte a Soul of the Night en una fragancia de gran fijación y estela, destinada a acompañarte durante horas, marcando cada paso con una firma sensual y enigmática.

Un perfume que habla en susurros ardientes

Soul of the Night no grita, seduce. Se desliza por la piel como un vestido de terciopelo negro, insinuando más que mostrando. Es una fragancia nocturna por excelencia, ideal para encuentros íntimos, noches de gala o para quienes buscan dejar una impresión memorable incluso en un suspiro.

Diseñado para almas indomables

No es una fragancia para todos. Quienes se enamoren de Soul of the Night descubrirán en él un fiel compañero de aventuras sensoriales. Es una elección audaz, cargada de carisma, que exige personalidad y presencia. Perfecto para quienes llevan el misterio como bandera y el deseo como brújula.

La alquimia del contraste

Uno de los grandes encantos de esta composición reside en su equilibrio perfecto entre lo dulce y lo oscuro, lo áspero y lo sedoso. Soul of the Night logra una alquimia olfativa donde cada nota tiene un propósito claro, ninguna sobra, todas suman. Es como una sinfonía donde cada acorde juega un papel vital para contar una historia que solo el olfato puede descifrar.

Un frasco que encierra una promesa

En su presentación de 50 ml, Soul of the Night concentra una intensidad que muchos perfumes más grandes no logran alcanzar. Es un elixir de sombras, una pócima embriagadora que despierta la imaginación y enciende los sentidos. Una joya olfativa que, una vez descubierta, resulta imposible de olvidar.

Una fragancia eterna como un secreto bien guardado

Como los recuerdos más íntimos, como las palabras que se susurran al oído y se quedan flotando en la piel, Soul of the Night permanece. Más que un perfume, es una experiencia, un vínculo emocional con ese instante en que la noche se vuelve cómplice y el deseo se vuelve arte.